lunes, 6 de noviembre de 2017

Máximo Franco Cavero (Vida y obra)






Máximo Franco Cavero (1913-1939) Nacio en el año 1913 en Alcalá de Gurrea, provincia de Huesca, (España) y murió el 1 de abril de 1939 en  Alicante, Comunidad Valenciana (España) fue un militante anarcosindicalista aragonés.

Pertenecía a una familia acomodada. Trabajaba como barbero y colaboró en las publicaciones libertarias "Tierra y Libertad" y "El Pueblo de Huescacon" con el pseudónimo Éufrates X.

Inspirado en la insurrección anarquista de enero de 1933 y en los hechos de Casas Viejas, el 9 de diciembre de 1933 proclamó el comunismo libertario en Alcalá de Gurrea.

En septiembre de 1934 fue encarcelado y en 1935 fue condenado con siete compañeros más por robo y asalto.1​ Después de la victoria del Frente Popular en las elecciones generales españolas de 1936 fue liberado.

El golpe de estado del 18 de julio de 1936 le sorprendió en Alcalá de Gurrea. Consiguió pasar a la zona republicana y se incorporó a las milicias confederales como cabeza de centuria de la Columna Roja y Negra. Después fue nombrado comandante de la División 127a de el Ejército Popular de la República, pero después de la caída del frente de Aragón en mayo de 1938 fue destituido por Juan Modesto Guilloto León, militante del Partido Comunista de España (PCE) quien intentó juzgarlo. Aun así, fue rehabilitado y se le concedió el mando de la 71a División, con la que aplastó a los comunistas en Ciudad Real en marzo de 1939.2

El 1 de abril de 1939, enterado de la rendición de la Segunda República, se suicidó en el puerto de Alicante con su amigo Evaristo Viñuales Larroy, cogidos de la mano izquierda y empuñando la pistola con la derecha, para evitar su detención por las tropas de Franco. «Esta es nuestra última protesta contra el fascismo», dijo Evaristo antes de apretar el gatillo.3

Referencias.




  1. Diego Navarro Bonilla (2012). Morir matando. Ediciones Espuela de Plata.

  2. José Ignacio Alvarez-Fernández (2007). Memoria y trauma en los testimonios de la represion franquista. Anthropos. p. p. 245.

  3. La palabra que nos salva de Víctor Pardo Lancina





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